Existen diversas formas de describir o intentar describir una Casa de Reposo, como Hogar Geriátrico, Hogar Permanente, Asilo de Ancianos, Hogar de Ancianos, Casa de Retiro, Residencia para Personas Mayores, entre otras.
En este artículo, definiremos detalles que aclararán muchos mitos y ayudarán a las personas a elegir adecuadamente dónde confiar a sus seres queridos.
Un Poco de Historia
Antiguamente, los centros o casas de reposo eran de índole religiosa, es decir, sacerdotes o monjas los dirigían como actos de caridad para ancianos que necesitaban hogar, alimentos, cuidado de su salud y otras asistencias personales.
Más tarde, pasaron a ser comunidades del sistema de salud y del estado, quienes serían gestores de este tipo de organizaciones. Algunos tienen a su cargo asilos de ancianos como Beneficencias Públicas orientadas a ancianos pobres y desamparados.
Definición de una Casa de Reposo o Asilo de Ancianos
Una Casa de Reposo ofrece servicios y asistencia a personas de la tercera edad (abuelitos), brindando alojamiento, actividades, alimentación y asistencia médica para mejorar la calidad de vida en su vejez. También es un espacio recreacional donde los abuelitos pueden compartir con otros de su edad e incluso con familiares que deseen visitarlos. La mayoría de las casas de reposo cuentan con servicios las 24 horas, profesionales multidisciplinarios y especialistas en el cuidado de los abuelitos.
Cada casa de reposo tiene servicios similares, pero varía el precio según el distrito, la infraestructura, la calidad de los profesionales y servicios, y sobre todo el espacio donde convivirán los abuelitos, ya sean internos o externos.
¿Cuál es la Diferencia entre un Asilo de Ancianos y Casa de Reposo?
Tanto un asilo de ancianos como una casa de reposo sirven para albergar personas de la tercera edad. Muchas personas consideran que un asilo de ancianos, al menos en Lima, es un lugar triste, pero esto depende de la organización y propietarios. Hay asilos de ancianos limpios e incluso lujosos, aunque otros no lo son. Es importante destacar que tanto una casa de reposo como un asilo de ancianos pueden ser empresas privadas o del estado.
Las casas de reposo se encargan de acoger de manera afectiva, atenta y segura a los diferentes casos de cada adulto mayor. El propósito es ofrecer servicios personalizados, ayuda y calidad a los adultos mayores. Cuida y elige bien la casa de reposo para tu familiar; siempre es bueno verificar salud, limpieza y, sobre todo, profesionalismo.